Nuevos tiempos, nuevas formas


Si echamos la vista atrás veremos como no sólo cambia nuestro entorno físico , sino también nuestra forma de relacionarnos con las personas que nos rodean. Hace 20 años si querías quedar para tomar algo con tu grupo de amigos era necesario concretar hora y lugar . Ahora la comunicación es mucho más rápida y fluida gracias a redes sociales que posibilitan la comunicación instantánea cómo WhatsApp o Instagram.

En una entrada anterior ya hablamos sobre el cambio que se ha dado en las relaciones entre individuos desde una perspectiva más general. Hoy hablaremos sobre algo que también ha cambiado a raíz de la tecnología y que puede resultar más ameno de debatir : ¿Ha cambiado nuestra forma de ligar respecto a algunos años atrás ?

Lejos queda ya salir y conocer al amor de tu vida en las circunstancias más aleatorias posibles, al más puro estilo de una película adolescente de Disney . Ya no hay que arriesgarse a llamar al teléfono fijo de la casa de la persona que te gusta y que quienes te respondan sean sus padres. Es más , cada vez tenemos más a nuestro alcance la posibilidad de hablar con otras personas que buscan lo mismo que nosotros mediante aplicaciones que todos y todas conoceréis como Tinder o Grindr, simplemente swipeando hacia la izquierda o hacia la derecha ... De hecho , para sorpresa de más de uno , existe incluso una versión cristiana de Tinder llamada Salt, que pone en contacto a cristianos solteros que buscan encontrar pareja ( o compañero de rezos ). 

No todo son aplicaciones para ligar . Hay mucho más : ¿Cómo olvidar los famosos ". opino" y   ". y digo si me lío" que en nuestros primero años de adolescencia era tan común ver en Instagram ? Antes era necesario conocer a la persona , hablar , tener largas conversaciones ... Ahora todo esto se ha reducido a las posibilidad de hablar a quien queramos en cualquier red social . Responder o reaccionar a una historia, dar "me gusta" a más de una foto... Nada que ver con preguntar por el número de teléfono. Ahora bien , objetivamente es necesario admitir que las cosas cambian , pero no existe una verdad absoluta en este tema . No está bien o mal , simplemente es algo que ha cambiado , y si es a mejor o a peor es algo que puede quedar a gusto del lector. 



Comentarios