Del pincel y el lápiz a la realidad virtual. Jorge Casas

 

Desde el principio de los tiempos, el ser humano se ha expresado escribiendo, dibujando o creando mediante dos elementos: Un ¨lienzo¨ que es el lugar de trabajo y comenzó siendo las paredes de las cuevas, pergaminos, papeles antiguos, lienzos de cuadro… La evolución llevó a que, esta práctica de plasmar una idea en un papel sirviera para avances científicos y tecnológicos así como para preservar el conocimiento. Grosso modo, el ser humano siempre se ha visto acompañado de elementos creados por otros contemporáneos o de la antigüedad y, eso ha ayudado a su crecimiento y desarrollo.

Actualmente, en el S XXI esto ha cobrado una nueva dimensión. Hoy en día podemos escribir con ordenador (aunque esto tampoco es un gran avance ya que existían las máquinas de escribir), pero, lo que no existían antes eras IAs capaces de reconocer y reproducir las palabras dictadas por una voz. Si echamos la vista atrás encontramos las figuras de los ¨escribas¨, hoy en día el propio ordenador es tu escriba.

 Y no para ahí, antes hemos mencionado el mundo del arte. Actualmente, hay IAs y programas capaces de crear por sí solos un edificio complejo, recrear un cuadro existente o, incluso modificarlo en cosa de segundos. Así mismo, cuando tu quieres recibir cierta información y no puedes o no te apetece leer los propios programas te ayudan. Al estilo de una madre que le cuenta cuentos a su hijo que no sabe leer existen los e-books narrados, las audioguías, los propios lectores artificiales…

Por último, hay que destacar que, los avances en este campo no se resumen solo al mundo de las ¨letras y del arte¨. Procesos como crear un retrato robot, un simple video explicativo de youtube o un programa para editar fotos artificialmente son ejemplos del salto evolutivo que ha dado este proceso que comenzó en las cavernas y actualmente continua en los ordenadores y los programas informáticos. 

Quizá se ha perdido el romanticismo de las cosas ¨hechas a mano¨, pero tampoco es así ya que, si tu quieres siempre podrás empuñar un lápiz o pintar un cuadro con pincel. Por tanto, esta evolución ha sido muy positiva para la humanidad